lunes, 31 de octubre de 2011

Competitividad

Competitividad: 

Competitividad es la habilidad de las empresas, industrias, regiones o áreas geográficas para generar, en un contexto de competencia internacional, niveles relativamente altos de ingresos y empleo de factores, sobre bases sostenibles. También la competitividad  es la capacidad de las empresas, industrias, regiones o áreas geográficas de mantener e incrementar su participación en el mercado nacional e internacional, a través de la capacidad de alcanzar los estándares de eficiencia prevalecientes en el resto del mundo, tanto en cuanto a la utilización de los factores de la producción como en la calidad del producto. Es decir que la competitividad de una región dependerá de la competitividad de las empresas en ella radicadas.
La competitividad resulta de la integración de varios factores: calidad de los productos (incluyendo el packaging), precio, tiempos de suministro, continuidad en el aprovisionamiento a los mercados demandantes, etc. Estos factores se asocian a empresas en particular. En la agregación hacia el concepto de competitividad influyen los factores estructurales que aseguran un ambiente favorable al desarrollo: educación, desarrollo en CyT, sistemas de innovación, acceso al crédito, sistemas de información, acción diplomática en el campo de la cooperación económica, infraestructura (redes de transporte, telecomunicaciones, energía, etc.). La experiencia indica que estos factores son resultado de políticas activas desplegadas por los Gobiernos (entendiendo que mejores desempeños individuales de las empresas generan mejores condiciones de empleo, etc.). También la competitividad implica una valoración relativa, de comparación entre economías por la preferencia de los mercados.

Competitividad Empresarial

De acuerdo a cada uno de los niveles del enfoque sistémico y gracias a la interacción que hay entre todos ellos, centraré el presente trabajo desde el nivel Micro con el fin de ver como la exigencia de mayor eficacia de las empresas es parte fundamental de la competitividad.
Las empresas se ven confrontadas hoy con mayores requerimientos que resultan de distintas tendencias. Se distinguen, entre ellas:
  • La globalización de la competencia en cada vez más mercados de productos;
  • La proliferación de competidores debido a los procesos exitosos de industrialización tardía y al buen resultado del ajuste estructural y la orientación exportadora;
  • La diferenciación de la demanda;
  • El acortamiento de los ciclos de producción;
  • La implementación de innovaciones radicales: nuevas técnicas (microelectrónica, biotecnología, ingeniería genética, nuevos materiales y nuevos conceptos organizativos), y
  • Avances radicales en sistemas tecnológicos que obligan a redefinir las fronteras entre las diferentes disciplinas.
La Competitividad Sistémica, dentro de la competencia Global y la Libertad de acción nacional analiza que para poder afrontar con éxito las nuevas exigencias, las empresas y sus organizaciones necesitan readecuarse tanto a nivel interno como en su entorno inmediato; analiza también que se requiere introducir profundos cambios en tres planos diferentes:

1 - En la Organización de la Producción: cuyo objetivo es acortar los tiempos de producción, sustituyendo.

2 - En la organización del desarrollo del producto: la estricta separación entre desarrollo, producción y comercialización encarecía en muchos casos los costos que implica el diseño de los productos; en otros casos los productos, no eran del gusto del cliente. La organización paralela de diferentes fases del desarrollo, y la reintegración del desarrollo, la producción y la comercialización contribuyen a disminuir fuertemente los tiempos de desarrollo, a fabricar productos con mayor eficiencia y a comercializarlos con mayor facilidad.

3 - En la organización y relaciones de suministro: las empresas reducen la profundidad de fabricación para poder concentrarse en la especialidad que asegura su competitividad; reorganizan el suministro introduciendo, sobre todo, sistemas de producción "justo a tiempo" y reorganizan su pirámide de subcontratación, reduciendo la cantidad de proveedores directos y elevando a algunos de ellos a la categoría de proveedores de sistemas integrados al proceso de desarrollo del producto.

Es claro que el objetivo es integrar estos tres planos de manera creativa para poder enfrentar los nuevos perfiles de clientes con sus nuevas necesidades y enfrentar los productos cuyo ciclo de vida se acorta cada vez más, por lo anterior se establece la necesidad de enfrentar la dinámica organizacional con un nuevo enfoque.

La diferenciación de la demanda;
  • El acortamiento de los ciclos de producción;
  • La implementación de innovaciones radicales: nuevas técnicas (microelectrónica, biotecnología, ingeniería genética, nuevos materiales y nuevos conceptos organizativos), y
  • Avances radicales en sistemas tecnológicos que obligan a redefinir las fronteras entre las diferentes disciplinas.

Competitividad Personal

La competitividad de una persona, depende de su equilibrio intelectual– lingüístico, emocional y corporal. El desarrollo de las siguientes 7 meses puede contribuir a elevar los niveles de perfección en nuestros procesos diarios, ayudándonos a vivir la vida que merecemos y deseamos. 

§ Saludable: Cuida su salud, se ejercita y alimenta adecuadamente para contar con la energía requerida en su trabajo intelectual, emocional y físico. Realiza un chequeo médico frecuente para prevenir y atender cualquier potencial afección. Está lleno de vitalidad y contagia energía. 

§ Sereno: Gerencia las respuestas emocionales que generan sus sentimientos y estados de ánimo, es firme cuando ha de serlo, pero emplea autocontrol, paciencia y tacto en su actuar. Evita que su amígdala cerebelosa produzca arranques de ira que afecten sus relaciones humanas. Disfruta de la tranquilidad y domina técnicas de auto–relajación. 

§ Sincero: Actúa en sus conversaciones y acciones basado en la ética, honestidad y justicia. Es abierto para expresar sus puntos de vista, empleando su verdad asertiva y respetuosamente, con franqueza y firmeza pero con consideración. 

§ Sencillo: Se maneja en sus relaciones personales y profesionales con humildad y simplicidad, no deja de conocer su valor y sus logros, pero reconoce que puede aprender de todo ser humano y que sus éxitos se los debe a otras personas. Evita la pompa y los lujos excesivos, pues sabe darle el justo valor a lo material, dentro de un clima de abundancia y prosperidad. 

§ Simpático: Es cortés, amable, educado en su hablar, evita los vicios comunicacionales del cinismo, sarcasmo, burla, humillación, discriminación, generalización y juicios sin sustentación. Busca ser asertivo, pero considerado y respetuoso del clima de sus conversaciones, fluyendo con buen humor, alegría y disfrute en su interacción humana. 

§ Servicial: Emplea el poder de la retribución y del servicio para llegar dentro de las necesidades de otros, haciéndose cargo de las inquietudes de quienes le rodean en su familia, trabajo y vecindad. Sabe que a través del servicio logra una elevación espiritual que le beneficia en otros ámbitos de su vida, por lo que ve al servicio como algo honroso y valioso para su vida y la de los demás.

 § Sinérgico: Coopera y crea climas de cooperación y ayuda mutua en sus equipos de trabajo, tanto en la familia, el gremio o la empresa. Se maneja a si mismo como una parte clave de un equipo y no como una pieza indispensable. Esto le hace tomar consciencia de la importancia de la coordinación, el apoyo, la humildad para aprender, la visión común, la creatividad y la libertad para generar impecabilidad en las acciones que toman los diferentes equipos humanos a los que pertenece. 

Competitividad Nacional

Es necesario hacer una distinción entre productividad y competitividad, la primera se refleja en un dato mejorado, es decir, en un indicador que rebasa el estándar, es un valor agregado superior al de la competencia, mientras que competitividad es la capacidad de sostener el ritmo de productividad. El diccionario Oxford de Economía define la competitividad como “la capacidad para competir en los mercados de bienes o servicios” También resulta necesario conocer la diferencia entre ventaja comparativa y competitiva. Se dice que un país tiene una ventaja comparativa en la producción de un bien si el costo de oportunidad de producir ese bien en términos de otros bienes es menor en ese país que en otros países,
la ventaja competitiva en cambio, es impulsada por las diferencias en la capacidad de transformar estos insumos en bienes y servicios para obtener la máxima utilidad, esta definición implica dos aspectos importantes como: tecnología y habilidades administrativas. Las empresas de una nación deben pasar de competir sobre ventajas comparativas a competitivas que surjan a partir de productos y procesos únicos.

Para comprender en su totalidad el término competitividad David Romo y Guillermo Andel definen varios niveles de competitividad en los cuales aplica, en cada uno de una manera diferente. El término se aplica a empresas, industrias, regiones o países. En el ámbito empresarial el significado de la competitividad de una empresa se deriva de su ventaja competitiva en los métodos de producción y organización frente a sus competidores. En este nivel, la capacidad para competir se basa en una combinación de precio y calidad del bien o servicio proporcionado, de manera que cuando la calidad es la misma en mercados competitivos, las empresas seguirán siendo competitivas si sus precios son tan bajos, o más, que los precios de sus competidores. Además aquellas que han logrado establecer un posicionamiento de alta calidad destacan del resto y mantenerse competitivas, incluso con precios más elevados, tal es el caso de algunos productos como cosméticos, artículos deportivos, partes y accesorios automotrices, etc. A finales de los años ochenta se consideraba que las empresas norteamericanas no eran ya tan competitivas como las japonesas debido a que todavía aplicaban métodos de producción en masa, mientras que los japoneses utilizaban ya sistemas de manufactura flexible y de producción justo a tiempo.
El Banco Interamericano de Desarrollo define la competitividad como “la calidad del entorno para realizar inversiones y para incrementar la productividad en un clima de estabilidad macroeconómica e integración a la economía nacional”

Bibliografia:


No hay comentarios:

Publicar un comentario